11 de octubre de 2014

Cocido madrileño

          Vamos a hacer un cocidito madrileño de los que quitan el hipo. Una receta sencilla, pero llena de sabor.

Ingrediente:

  • 300gr de garbanzos
  • 250gr de morcillo
  • 1 chorizo
  • 1 morcilla
  • tocino veteado
  • 1 hueso de caña fresco
  • 1 punta de jamon
  • 1/4 de gallina
  • 1 patata
  • 2 zanahoria
  • repollo.
  • Para la bola:
  • 1 huevo
  • perejil
  • 1 diente de ajo
  • pan rallado.

          Poner los garbanzos en remojo la noche anterior. En una olla poner los garbanzos, el hueso, la punta de jamon, el cuarto de gallina, el morcillo, la bola una vez hecha como indico más abajo,la patata y las zanahorias. Añadir la sal y cerrar la olla. Dejarlo media hora a partir de cuando empieza a salir vapor.







          En una cazuela poner caldo del cocido y el repollo, una vez hecho, yo lo rehogo con unos ajos, pero ésto es al gusto del comensal.  El chorizo y la morcilla, los hago a parte con un poco de caldo del cocido.





Bola o relleno para el cocido:

          Batir un huevo, añadir perejil picado y un diente de ajo muy picado, una pizca de sal y pan rayado, mezclar todo. Hacer como una croqueta, que esté jugosa y freir.







          Y éste es el resultado final:











          El cocido madrileño se toma con una sopa de fideos  hecha con el caldo antes de comer los garbanzos la carne y berza, en otras regiones de España, se come primero la carne con los garbanzos y la berza y por último se toma la sopa.

          El origen  de este plato viene de mucho tiempo atrás, para encontrarlo, nos tendríamos que remontar al medievo. Los historiadores apuntan a que el origen de este plato se encuentra en la evolución de la denominada olla podrida que se compone de judías, la morcilla de Burgos, costillas adobadas y la oreja del cerdo.

          No sería hasta finales del siglo XVII cuando se empezase a hablar del cocido que ya había cambiado las alubias por los garbanzos.

     El cocido tiene un origen humilde siendo consumido por las clases más bajas de la sociedad, posiblemente, y debido a la precariedad de las gentes de aquella época, la carne sería privilegio de unos pocos. Con el tiempo,fue llegando poco a poco al resto de las clases sociales hasta el punto de convertirse en un plato típico de la capital española.




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